La ronda y su encanto

En nuestra danza existe un gesto que abre las puertas al juego, a la interacción y al intercambio. Ese gesto más que una seña es una invitación a la expresión en comunidad. En este artículo exploraremos la esencia de la ronda, en una danza que trasciende lo convencional y nos invita a sumergirnos en el encanto de la creatividad colectiva.

Luna Creciente: una postura icónica

La semana pasada estvimos jugando en las redes. Les dejé una imagen y una pregunta: ¿Qué tiene de distintiva la posición de brazos en “Luna Creciente”?

Estamos hablando de la posición de brazos en L -derecho vertical- que usamos dentro del repertorio de pasos lentos del formato de improvisación grupal FCBD®.

Recibí muchos comentarios súper interesantes tanto de bailarinas que tienen experiencia en esta danza como de bailarinas de otros estilos y público general. Aquí cito algunos:

  • “No sé, pero es muy de tribal”
  • “Cuando pienso en tribal viene esa postura a mis brazos”

Sí, podríamos decir que es una postura “icónica” dentro del estilo tribal1 de bellydance.

  • “Proyección. Siento que da más fuerza al juego con la mirada también, los veo como brazos poderos.”

Coincido muchísimo: cuando hablamos de la elegancia y fuerza que transmite el estilo FCBD® y las fusiones asociadas al mismo, estamos hablando en parte de posturas como esta: una columna erguida con unas líneas de brazos muy definidas, firmes, abiertas.
Esta postura tiene muchas influencias del flamenco y se diferencia notablemente de las posturas más clásicas del Raqs Sharqi2.

  • “¿Marca el cambio de pasos en la improvisación grupal?”
  • “¿Para indicar hacia qué lado va a girar la líder?”
  • “Armar la ronda”
  • “Una señal?”
  • “Una postura de ‘llamdo’ a momento de conexión visual y grupal”
  • “Indica el encuentro con las compañeras y con las miradas en una postura abierta”

Aquí ya nos sumergimos en otro mundo: más allá de lo estético, esta postura tiene una función dentro del formato de improvisación grupal ¡vamos a ver de qué se trata!

Señas: comunicación no verbal durante la improvisación en grupo

Dentro del formato de improvisación grupal tenemos algunos gestos que nos permiten indicar que algo nuevo va a suceder. Esas señas pueden vincularse con la posición de nuestros brazos o de nuestro cuerpo, un gesto con la cabeza o la dirección de nuestra mirada, la formación, la interpretación de la música, etc.

En este sentido la posición de brazos en Luna creciente, no es estrictamente una seña, ya que no nos obliga a continuar de una manera específica. Pero sí es una llave que desbloquea un movimiento fundamental: el pivot. Este movimiento nos permite girar y enfrentar a nuestras compañeras, formando un círculo que redefine el concepto de liderazgo.

El Pivot: un movimiento muy especial

La posición de brazos Luna creciente nos permite realizar el pivot3. El pivot consiste en girar sobre nuestro eje, dando una vuelta mientras sostenemos una postura fija (sin aislamientos ni pasos complejos).

El Pivot puede tener 2 finalidades: girar todas juntas como grupo, dando una vuelta de 360º, o quedar enfrentadas en ronda.

La posición de brazos en Luna creciente es tan especial porque nos permite hacer algo muy distintivo: pivotear y, opcionalmente, armar la ronda.

Sin embargo, como les comentaba, pivotear y armar la ronda es una opción, por lo cual no deberíamos interpretar esta postura como una seña de que obligatoriamente giraremos y/o armaremos la ronda.

¿Qué opciones nos da la posición de brazos en L?

  • Una de las opciones es permanecer en esta postura realizando algún aislamiento ¿Se te ocurre/n cuál/es?
  • Otra opción es iniciar algún paso complejo ¿Cuál/es podemos iniciar desde esta postura?
  • Siempre existe la opción de hacer una transición a otra postura de brazos y continuar nuestra improvisación desde allí.

Y las opciones que involucran al pivot, que son dos:

  • Realizar un pivot completo (360°) ¿Qué concepto aplicamos en este caso?
  • O, nuestro tema de la semana, armar la ronda.

Una pregunta crucial: ¿Quién arma la ronda?

La ronda puede armarse por voluntad exclusiva de la líder o como respuesta de la/s seguidora/s.
Para que se arme la ronda es necesario que la líder dé media vuelta (180°) y esto puede darse por dos motivos:

  1. porque la líder decide girar y esperar a sus seguidoras
  2. porque la lider inicia un giro pero sus seguidoras la esperan sin girar

El caso 1. es el más habitual y el que yo recomiendo para empezar.
El caso 2. lo recomiendo para bailarinas que hayan desarrollado criterios de composición grupal más avanzados, de modo tal que sepan usarlo en los casos en que la dinámica de la improvisación y/o la música lo ameritan.

La magia de la ronda y el contacto visual

Una vez que armamos la ronda algo mágico sucede, las miradas se conectan. La ronda nos comunica y nos iguala.

Lo primero que hacemos al enfrentarnos es entrar en contacto visual. Nos miramos y nos reconocemos, no estamos solas: estamos juntas acompañándonos, cooperando, sosteniéndonos. En este punto se nos abren nuevas puertas, dos opciones fundamentales (entre otras):

La Luna que crece o el cielo estrellado.

La Luna que crece

Desde la posición de brazos en Luna creciente, vamos a ir a la posición de brazos verticales: Luna llena. Es una forma simple de recordarlo, la Luna creciente pasa a su fase de Luna llena.

Desde allí vamos a desplazarnos en ronda, hacia nuestra izquierda (sentido horario) realizando adornos con nuestros brazos, primero con el derecho y si es necesario continuando con el izquierdo.

En este punto hay algo que me gusta visualizar: imaginemos que sostenemos la inmensa luna brillante en nuestras manos. La luna debe estar siempre en alto, no la podemos dejar caer.

Sostengo la luna con mi mano izquierda mientras adorno el desplazamiento con brazo derecho, y sostengo la luna con derecha mientras adorno con izquierdo. Antes de ir a cualquier otra posición de brazos o paso ambas manos deben volver a la posición de Luna llena.

Una metáfora cautivante

¿Cómo no ver la metáfora que se nos devela en este cielo? La Luna que crece y se llena cuando armamos la ronda, somos nosotras mismas creciendo y brillando fuerte cuando conseguimos la complicidad de compartir un objetivo. Pero, atención: se trata de una oportunidad que se nos presenta, no es fuerza mayor, por lo tanto somos nosotras mismas quienes debemos tomar la oportunidad de crear esa sinergia.

El Cielo estrellado, una opción un poquito más desafiante

De la posición de Luna Creciente vamos a llevar los brazos a la posición horizontal, Luna Nueva… y vamos a visualizar el inmenso cielo estrellado. Desde esta posición vamos a realizar la ondulación de brazos, sincronizándola esmeradamente con nuestras compañeras. Es un desplazamiento algo más lento, más íntimo y muy conectado.

La responsabilidad de tener opciones

Tener opciones es una de las partes más divertidas de nuestra danza, de nuestras vidas. Pero también es la parte más difícil. Las opciones nos hacen dudar, nos pueden confundir; pero así nos invitan a analizar, aprender, interactuar. Es importante encontrar personas que nos guíen, ayudándonos a conocerlas y diferenciarlas para poder elegir. Es fundamental encontrar y generar espacios donde explorar de forma segura, donde animarnos a probar para conocer y crecer.

Elegir nos expone, nos compromete; pero también nos hacer ser quienes somos y nos conduce hacia quienes queremos ser.

¿Querés tomar el Taller de Brazos en Luna Creciente? Encontralo en este enlace.

¿Querés leer más sobre las posturas de brazos en el formato FCBD® y los Talleres de Fases de la Luna? Leé esta nota.

  1. En referencia a la denominación estilo tribal: tengamos en cuenta que estamos hablando de un subgénero de danza del vientre desarrollado en los EEUU, bautizado como “Tribal” a partir del desarrollo del formato de improvisación grupal FCBD® Style, popularizado como “American Tribal Style Bellydance” y las fusiones que nacieron de allí: “Tribal Fusion Bellydance”. ↩︎
  2. Raqs sharqi رقص شرقي es en árabe Raqs = Danza y Sharqi = Este. Danze del este o Danza oriental. ↩︎
  3. No es la única opción, pero es escencial, y es la primera que enseño en mis clases regulares. ↩︎

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